¿Cómo mantener cuidado nuestro micromotor?
Cuando compramos un micromotor podológico, una parte fundamental es aprender a manejarlo para extraer el máximo partido.
Sin embargo, no sólo es importante saber manejarlo correctamente, sino que el cuidado y mantenimiento regular de nuestro micromotor nos ayudará a mantenerlo en perfecto estado durante mucho más tiempo.
La mayor parte de las indicencias que tienen los micromotores de podología se dan por un mal mantenimiento o el uso de productos inadecuados que acaban dañando nuestro equipo.
Piezas de mano: extraíbles o monoblock
El primer paso es distuinguir nuestras piezas de mano. Tenemos dos tipos de piezas, las extraíbles, que como su nombre indica son independientes del micromotor, y las monoblock o integradas, que son las que no pueden separarse del micromotor.
¿Cómo se limpia el micromotor de podología? Mantenimiento del micromotor
Diferenciaremos aquí los micromotores de técnicas en seco de los de técnica húmeda. Tanto los extraíbles como los monoblock pueden usar ambas técnicas.
En el caso de los micromotores de técnica en seco, estamos hablando de aquellos que no irrigan agua a través de la pieza de mano. Estos son autoventilados, lo que significa que ellos mismos se refrigeran a través de unas rejillas colocadas en sus laterales.
Para la limpieza de estos micromotores de técnica en seco, pulverizaremos un poco de aire en las rejillas o si no tenemos, podemos pasar un trapo húmedo, no mojado, por las mismas. Lo más importante será que no entre ningún tipo de líquido, ya sea agua o aceites, dentro de la pieza.
En el caso de la limpieza de los micromotores de técnica húmeda, estos no vienen refrigerados y no contienen rejilla sino que vienen con el cuerpo totalmente cerrado, ya que permite trabajar con irrigación de agua. Al tener este tipo de irrigación interna, la propia presión de aire refrigera el micromotor, no necesitan mantenimiento.
Lubricación del micromotor de podología
Para los micromotores extraíbles, sí podemos utilizar lubricación en la pieza extraíble. Para su lubricación, extraeremos la pieza de mano y una vez extraída, quitaremos la fresa. Metemos la boquilla del lubricante por la parte trasera de la pieza de mano, encajándola bien y mantenemos apretado durante 2 segundos para que se pulverice completamente. Dejaremos la pieza de mano en posición vertical durante varios días para que se lubrique completamente.
Cuando vayamos a utilizarla de nuevo, es importante limpiar los restos que hayan podido quedar para que no entre nada de aceite en contacto con el micromotor.
Por su parte, para los micromotores monoblock no utilizaremos lubricación alguna. Es importante que no entre aceite ni agua dentro del micromotor.
¿Cómo evitar que el micromotor se ensucie?
Ya hemos visto cómo limpiar un micromotor, pero si queremos evitar que la suciedad entre dentro del equipo, podemos utilizar discos antisuciedad. En el siguiente vídeo nuestro compañero nos cuenta cómo debemos colocarlos correctamente.